Es fundamental estar atento a los cambios en tu cuerpo y consultar a un especialista si notas alguna de las siguientes señales de alerta:
- Presencia de bultos o tumores.
La aparición de un bulto o masa anormal en cualquier parte del cuerpo, especialmente en áreas como los senos, el cuello, las axilas, la ingle o el abdomen, puede ser una señal de advertencia. Aunque no todos los bultos son cancerosos, es esencial que un médico los evalúe para descartar la presencia de un tumor maligno.
- Pérdida de peso inexplicada.
La pérdida de peso repentina e involuntaria, especialmente si no has realizado cambios en tu dieta o nivel de actividad física, puede ser un indicio de cáncer. La pérdida de peso inexplicada es un síntoma común de cánceres como el de páncreas, estómago, esófago y pulmón.
- Cambios en los lunares o manchas en la piel.
El cáncer de piel, como el melanoma, puede manifestarse a través de cambios en lunares existentes o la aparición de nuevas manchas en la piel. Es importante observar los lunares utilizando el método ABCDE:
A: Asimetría
B: Bordes irregulares
C: Color desigual
D: Diámetro mayor de 6 mm
E: Evolución o cambio en el tiempo
- Sangrado inusual.
Cualquier tipo de sangrado inusual, como sangrado vaginal fuera del ciclo menstrual, sangre en la orina o en las heces, o tos con sangre, debe ser investigado de inmediato. Estos síntomas pueden ser indicativos de cánceres como el de colon, recto, vejiga, pulmón o endometrio.
- Fatiga persistente.
La fatiga extrema y persistente que no mejora con el descanso puede ser un síntoma de cáncer, especialmente si se acompaña de otros síntomas. La fatiga puede estar asociada con el crecimiento de células cancerosas que afectan el funcionamiento normal del cuerpo.
- Dolor persistente.
El dolor crónico, sin causa aparente y que no mejora con el tratamiento convencional, puede ser un síntoma de cáncer. El dolor puede ser indicativo de un tumor que presiona órganos o nervios.
- Cambios en los hábitos intestinales o urinarios.
Cualquier cambio persistente en los hábitos de evacuación intestinal o urinaria, como diarrea, estreñimiento, necesidad frecuente de orinar, o dolor al orinar, podría ser un signo de cáncer de colon, vejiga o próstata.
- Dificultad para tragar o indigestión persistente.
La dificultad para tragar o la sensación de que los alimentos se quedan atascados en la garganta puede ser un síntoma de cáncer de esófago o garganta. La indigestión persistente puede estar asociada con cánceres del sistema digestivo.